Hoy otra vez LA CITY nos encuentra con una decisión clave del Banco Central. Acaba de disponer una suba de las tasas de interés, a mi gusto interesante, porque en algunos tramos equipara la tasa efectiva anual con la inflación que prevén los analistas, y podría ayudar en la tarea de la esterilización monetaria.
La idea de ir a tasas positivas la había anticipado a fines de año pero avanza no solo en línea con su planteo sino en la recta final de las negociaciones con el FMI.
La mayoría de los analistas venía observando la necesidad de esta política. Algunos creen que ya es tarde. Ojalá que no.
En El Cronista venimos comentando en las últimas semanas las consecuencias que tendrá en las cuentas del Banco Central -incremento de la deuda por intereses- como en las del Tesoro -engrosamiento de la deuda-. También en lo que se proyecta al sector privado. Esto es, un aumento en los créditos dado el incremento del costo del fondeo para los bancos.
Las urgencias del Banco Central se sitúan en relación con la disparada de la inflación y la operación sobre los aspectos «multicausales», esto es, sobre la oferta de dinero y la demanda de dólares.
Dado la relevancia de lo que hace el Banco Central, más abajo te vamos a contar algunas cosas que están haciendo y pensando nuestros vecinos, que personalmente me llevan tranquilidad respecto al efecto ejemplificador de otros referentes políticos. También te contamos cómo hace la Fed para no pifiar ese mismo equilibrio: aumentar la tasa y protejer el patrimonio de los norteaemericanos. Y por último, lo que está pasando en el MAE, una transformación con muchas aristas y con impacto en los bancos.
FUENTE: Newsletter de El Cronista. Autor Ariel Cohen